jueves, 11 de septiembre de 2014

Seis secretos para una venta perfecta

Realiza un sondeo de tus Clientes

Antes de empezar una venta es necesario que tengas en mente qué tipo de persona es la adecuada para los servicios o productos de tu empresa.

De este modo, podrás distinguir más fácilmente a los clientes potenciales que se acerquen a ti, y no perderás tiempo con personas que no necesiten de tus servicios o que no puedan pagarlos.

Los aspectos más importantes que debes conocer antes de iniciar el proceso de la venta son:

¿Cuál es el presupuesto de tu cliente?
¿Estás hablando realmente con la persona que puede tomar las decisiones al momento de realizar una compra?

No es necesario que este proceso sea muy largo, puedes obtener esta información simplemente preguntando qué es lo que están buscando exactamente, cuál es su presupuesto y si tienen ya en mente por dónde empezar.

No abrumes a tus clientes

Debes tener muy claro cuál es la cantidad exacta de información que necesitan conocer tus clientes acerca de tu producto o servicio para que se concreten muchas más ventas.

Prepara algunas notas para que tengas la información exacta a la mano, y no trates de sorprenderlos con más datos o ejemplos de los necesarios.

Entre más información les des es más probable que se pierdan entre ella, y si el cliente está confundido es poco probable que se convenza de comprar algo.

Debes evitar en todo momento utilizar un lenguaje sofisticado o términos especializados para tratar de impresionar a tus clientes, no te entenderán y sólo te verás pretencioso.

No te desesperes

Tus clientes deben saber que tus servicios o productos son tan buenos que no necesitas rogarles para que compren, es algo que les beneficiará y por lo tanto les conviene hacerlo. Si te muestras seguro a la hora de vender, les harás saber a tus clientes que tienes confianza en lo que vendes y como consecuencia indirecta subirán tus ventas.

Otra opción que tienes (si no quieres esperar demasiado a que los clientes se den cuenta de la gran oportunidad que tienen enfrente), es poner límites especiales para las ofertas que estás haciendo; puedes decir que por ahora sólo estás buscando un número reducido de clientes (para ofrecerles el servicio más completo) o algo por estilo.

Pero, es importante que esto sea verdad y no sólo una táctica para vender, ya que si tus clientes se dan cuenta que estabas mintiendo se perderá la confianza.

No digas “sí” porque sí

Este es el error más común que se comete en ventas y el que te puede traer más problemas. Es común, porque parece natural pensar que “el cliente siempre tiene la razón” y entonces debes tratar de darle todo lo que pida, pero si el cliente se da cuenta que puede pedir más y tú no dices nada, te llevará a extremos donde ya no te será rentable proveer el servicio o producto.

Si llegas a este punto, no podrás cumplir todas las promesas que has hecho. Esto te hace ver mal y probablemente perderás no sólo a ese cliente, si no algunos otros potenciales que se enteren del embrollo en que te has metido.

Por eso, es importante que desde el inicio establezcas que es posible hacer y que no, esto hará que tus ganancias se mantengan estables y, más importante, te evitará tener problemas y estrés innecesario dentro del trabajo, así podrás tener a tus clientes más felices.

No pierdas tiempo

Cuando estés en una reunión o en una cita con algún cliente, no pierdas de vista que es lo que quieres obtener del tiempo que estás invirtiendo ahí.

Puedes hablar de cosas que no tienen que ver con el negocio para establecer una relación sustancial con tus clientes, siempre y cuando sea después de que has terminado de comunicarles toda la información pertinente para la venta y estén convencidos de contratar tus servicios.

Antes de eso, dispones de muy poco tiempo para captar la atención de tus clientes y convencerlos. Los negocios son lo primero, debes enfocarte en ello ya que las personas pierden el interés después de unos pocos minutos. Si ya cerraste la venta, ahora sí, puedes relajarte y hablar sobre el clima.

No hables de más

Un grave error que se puede cometer es seguir hablando después de que el cliente ha dicho que quiere concretar la venta, esto puede llevar a que digas algo equivocado que haga que la persona cambie de opinión.

Así que recuerda, si ya has cerrado el trato, cambia de tema, puedes hablar de otros temas ligeros (nada de política o religión, pues eso tiene el potencial también de crear algún conflicto) y trata de cerrar la reunión de una manera amigable.

Todo es cuestión de práctica, entre más ensayes tus técnicas más efectivo serás. Ningún negocio comienza de la nada, es necesario que los usuarios vayan conociendo poco a poco tus productos, una vez que tengas a tus primeros clientes regulares, las cosas serán más fáciles para tu empresa.

No es necesario ser un gran especialista para lograr vender tus productos, sólo debes seguir estos consejos y estarás listo para empezar a cerrar tratos y ganar más dinero. Así que no gastes demasiado tiempo perfeccionando un técnica especial, con estos consejos podrás conseguir grandes beneficios.

Fuente: Eureka-Startups